▷ Mi perro se lame mucho el ano, ¿por qué?

Encontrarte con que mi perro se lame mucho el ano, además de curioso, puede resultarte preocupante, y con toda razón, ya que no es una situación agradable. En este sentido, que alguno de tus compañeros de cuatro patas preste demasiada atención a esta zona puede deberse a múltiples razones, y es necesario acudir al veterinario para descubrirla y tratarlo. Sin embargo, aquí te contamos 4 principales causantes de este lamido excesivo, para que vayas a consulta informado.

1. ¿Es normal si mi perro se lame mucho el ano?
2. Infecciones por hongos
3. Glándulas anales infectadas
4. Parásitos
5. Alergias alimentarias

¿Es normal si mi perro se lame mucho el ano?

Una duda a aclarar antes de hablar de los principales causantes de este comportamiento es si, de hecho, es normal.

Y es que, a diferencia de los humanos, los peludos suelen lamerse las aberturas anales como parte de su comportamiento natural. Estos animales usan su boca y su lengua para acicalarse, como parte de su proceso de preparación, y la región anal no escapa a ello.

No obstante, solo de forma ocasional. Si la conducta pasa a ser exagerada, lo hace demasiadas veces o con mucho ahínco, es una señal de que algo está sucediendo.

1.   Infecciones por hongos

Este tipo de infecciones pueden ser difíciles de tratar, de hecho, debes estar atento a los síntomas para acudir cuanto antes al veterinario. Las infecciones por hongos pueden generarse por varias razones, por ejemplo, cuando hay alguna alteración en el equilibrio de la flora natural del organismo. Además, las alergias pueden ser las causantes de las mismas, haciendo que la piel se vuelva grasa.

2.   Glándulas anales infectadas

Si las glándulas anales no drenan adecuadamente pueden infectarse, provocando dolor e inflamación, pudiendo ser la razón por la que mi perro se lame mucho el ano.

Cuando las glándulas están infectadas suelen presentar un líquido descolorido y espeso, así como estar llenas de pus y, en ciertos casos, puede salir sangre del ano. Para el diagnóstico, el veterinario necesitará saber sobre lesiones o enfermedades recientes, cómo se comporta el perro y la dieta que sigue, igual que efectuar un examen exhaustivo.

3.   Parásitos

Los parásitos internos o gusanos pueden afectar el tracto digestivo de tu mascota y generar irritación anal, junto a deficiencias nutricionales y anemia. Estos invasores pueden ser difíciles de detectar a simple vista, pero un examen de heces facilitará la comprobación.

Entonces, si notas que mi perro se lame mucho el ano, tiene vómitos, diarrea e inflamación, llévalo al veterinario para el diagnóstico y tratamiento oportuno. También cumple con el esquema de desparasitación recomendado por el profesional para evitar complicaciones graves.

4.   Alergias alimentarias

Lamerse el ano con frecuencia puede ser un signo de que el perro sufre de alergias alimentarias. Este tipo de reacción también puede ser complicada de diagnosticar, aunque el veterinario puede recurrir a pruebas que faciliten la identificación del alérgeno y la dieta posterior a seguir. En algunos casos se recurre a la dieta hipoalergénica y a fármacos para aliviar los síntomas, pero siempre debe ser consultado con el experto.

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