¡NOVEDAD!
La peritonitis en gatos es una enfermedad grave a la que tus mascotas pueden estar expuestos y que puede ocasionar desde problemas respiratorios severos, hasta la muerte del infectado. Se trata, entonces, de un padecimiento que debes conocer como cuidador y, por ello, aquí te contamos qué es, cómo se contagia y cómo prevenirla.
- ¿Qué es la peritonitis en gatos?
- Contagio de la peritonitis en los gatos
- Síntomas de la PIF
- ¿Cómo puede prevenirse la peritonitis en gatos?
¿Qué es la peritonitis en gatos?
También conocida como peritonitis infecciosa felina o PIF, esta enfermedad es causada por un coronavirus felino.
Lo cierto es que es común que estos animales se infecten por coronavirus, aunque los efectos no son graves la mayoría de las veces. No obstante, en ocasiones, este virus muta dentro del organismo, pudiendo dar lugar a una alteración con el nombre de PIF.
Contagio de la peritonitis en los gatos
Este virus sigue una transmisión por vía oro-fecal, lo que significa que es eliminado por las heces y es a través de estas que un nuevo individuo se infecta, ya sea al acicalarse o al comer.
Gran parte de los animales infectados excretan el virus por sus heces por un tiempo variable, luego paran de hacerlo. Además, es importante saber que un mismo gato infectado es receptivo a reinfectarse mediante las heces de otro gato y volver a expulsarlo.
Dicho virus puede sobrevivir desde horas, hasta uno pocos días en el ambiente; de igual forma, en ocasiones puede ser liberado por la saliva o atravesar la placenta.
Es necesario recalcar que, aun cuando un felino esté infectado por coronavirus, no significa que vaya a desarrollar la peritonitis en gatos.
Síntomas de la PIF
Debido a que tiene manifestaciones clínicas diversas, la peritonitis en gatos no tiene síntomas o signos clínicos exclusivos de la enfermedad o que solo se asocien con ella. Por ello, hasta el momento se han establecido dos clases de cuadros clínicos:
PIF húmedo o forma efusiva
Es la forma aguda de la enfermedad y la más común, el PIF húmedo está caracterizado por la acumulación de líquido amarillento en la cavidad torácica y/o abdominal del animal. En consecuencia, se presentan problemas respiratorios graves y evidentes.
PIF seco o forma no efusiva
Tiene un desarrollo más lento y logra afectar a diferentes órganos, por lo que, se generan reacciones inflamatorias y granulomatosas, así como necrosis, que influyen en las funciones normales del animal. Suele incidir en los órganos abdominales, principalmente el riñón y ciertos ganglios, en menor medida el hígado y bazo.
El PIF seco puede afectar al sistema nervioso también, provocando síntomas oculares o neurológicos y los demás signos que puedan aparecer, dependerán de los órganos aquejados.
Síntomas compartidos por la forma efusiva y no efusiva
Ambas formas de PIF pueden combinarse durante el desarrollo de la enfermedad, asociándose con los cambios en la inmunidad del gato enfermo. Así, entre los síntomas que ambos cuadros pueden compartir, están:
- Fiebre.
- Decaimiento.
- Pérdida de peso.
- Falta de apetito.
¿Cómo puede prevenirse la peritonitis en gatos?
Ya que la tasa de mortalidad por peritonitis infecciosa en gatos es alta, su tratamiento suele estar enfocado en mejorar la calidad de vida del paciente. Además, es una enfermedad poco frecuente en gatos caseros, sin embargo, existen algunas medidas que pueden minimizar el riesgo de padecerla:
- Garantizar la desparasitación adecuada.
- Mantener una buena higiene del arenero.
- Si hay más de un gato, cada uno debe tener su propio arenero, comedero y bebedero.
- Evitar factores de estrés.
- Alejar la zona de alimentación del área del arenero.
- No castrar o esterilizar y vacunar el mismo día.
👉🏼 ¿Aún tienes dudas?
En VetEasy puedes encontrar veterinarios para responder tus dudas sobre la peritonitis en gatos, si es bueno recurrir a alguna vacuna, qué puedes hacer para garantizar el bienestar de tus mascotas, y mucho más. ¡Descúbrelos aquí!
