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Aunque la rigidez muscular en perros puede ser consecuencia o acompañar a diversas condiciones y enfermedades, en este artículo de VetEasy nos centraremos en los calambres.
Dichos calambres son una clase de espasmo muscular súbito, esto significa que es una contracción repentina e involuntaria de determinados músculos. En realidad, cualquier músculo puede verse afectado, pero suelen afectar principalmente los de las piernas y patas. Además, aun cuando puede parecer un problema menor, los mismos pueden provocar un dolor intenso en el perro, afectar su movilidad y perjudicar su calidad de vida.
- Rigidez muscular en perros como síntoma de un calambre
- ¿Qué hacer ante un calambre?
- Otras enfermedades que generan rigidez muscular en perros
Rigidez muscular en perros como síntoma de un calambre
La duración e intensidad de los síntomas dependerán de la severidad del calambre, siendo la rigidez muscular en los perros uno de los más característicos.
Además de la inflexibilidad, el animal también puede presentar dolor muscular y ser incapaz de moverse. En casos de mayor gravedad, pueden presentarse convulsiones o el colapso del perro, aunque este es un escenario poco frecuente.
Causas de los calambres
Deshidratación, sobre todo durante rutinas de ejercicio.
- Trastornos neurológicos y tumores cerebrales que propician la pérdida total o parcial de su función nerviosa.
- Enfermedades degenerativas, principalmente aquellas que afectan músculos o huesos, y que llevan a la inmovilización.
- Convulsiones producto de una enfermedad, como el cáncer o el moquillo, por un trauma o por malformaciones congénitas.
- Debilidad muscular que también puede estar asociada a otro padecimiento, mala nutrición, malformaciones congénitas, poca actividad física y hasta por degeneración de tejidos musculares y óseos, producto del envejecimiento.
- Estrés crónico, en este caso, suele presentarse una excesiva y permanente rigidez muscular en perros.
- Problemas de circulación, los cuales llegan a perjudicar la oxigenación de los músculos, lo que favorece el surgimiento de calambres.
¿Qué hacer ante un calambre?
El tratamiento dependerá de la intensidad y la frecuencia de los espasmos, así como de la salud del perro y la causa de los mismos. Entonces, lo mejor es acudir al veterinario si hay presencia de rigidez u otro problema muscular.
En casa, y si el episodio dura solo unos minutos, debes detener cualquier actividad física que pueda estar realizando, asegurándote de que tu compi esté bien hidratado. Asimismo, puedes efectuar unos suaves masajes para favorecer la oxigenación de tejidos, lo que ayudará a aliviar la rigidez muscular y recuperar los movimientos.
Otras enfermedades que generan rigidez muscular en perros
Como ya has leído, los calambres no son los únicos que tienen como síntoma o propician la aparición de la rigidez muscular en los perros. Otras razones son:
- Déficit de calcio en la dieta.
- Problemas en las articulaciones.
- Miopatías inflamatorias infecciosas.
- Intoxicaciones.
- Epilepsia canina.
- Accidentes cerebrovasculares (parálisis de ciertas partes del cuerpo).
Con esto en mente, ante la presencia de rigidez en los músculos o síntomas asociados a estos, es imprescindible acudir al veterinario. Sobre todo, si son acompañados por otros signos de alarma como descoordinación, convulsiones, muestras de dolor, entre otros.
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