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Las costras en perros pueden ser un indicativo de que la salud del animal está siendo perjudicada por alguna causa específica. No obstante, existen muchas razones por las que tu mascota presenta estas incrustaciones en su piel, por lo que necesitarías ayuda de un veterinario para diagnosticarlo.
Pero, si estás interesado en saber qué padecimientos se encuentran asociados a la formación de costras, aquí te dejamos una lista con los casos más probables.
- Dermatitis, el principal causante de las costras en perros
- Sarna canina
- Infección por hongos
- Leishmania
1. Dermatitis, el principal causante de las costras en perros
La dermatitis es, sin duda alguna, el principal factor que puede generar la formación de costras. Dicho esto, de todos los tipos que existen, se pueden mencionar dos que son los más resaltantes: La atópica y la seborreica.
Dermatitis atópica
Se trata de una afección de la piel que puede afectar tanto a humanos como a animales. Aunque la causa real es desconocida, muchos expertos coinciden en que es una enfermedad intermitente de tipo cutánea, que aparece debido a la presencia de agentes irritantes.
Además de las costras en perros, entre sus síntomas destaca el picor constante, con frecuentes rascados, heridas y enrojecimiento de la piel.
Dermatitis seborreica
También es conocida como seborrea canina, otra afección cutánea que es muy común en perros. Esta enfermedad afecta sobre todo la zona del rostro, las patas del animal y el dorso. Es consecuencia de una producción excesiva de sebo, generada por las glándulas sebáceas.
Dentro de la sintomatología se presentan escamas blanquecinas o amarillentas que se adhieren al pelaje. Asimismo, se evidencian costras en la piel del animal, debido al frecuente rascado, así como un olor corporal muy intenso.
2. Sarna canina
La sarna es otra de las razones por las que aparecen las costras en perros. Esta se define como una infección en la piel que es generada por los ácaros. Los mismos se instalan en la piel del animal para alimentarse de la queratina y el sebo que este mismo produce, reproduciéndose de forma rápida y extendiéndose por todo el cuerpo.
Existen varios tipos de sarna, pero las más comunes en perros son la demodécica y la sarcóptica. La primera mencionada puede ser detectada revisando la cabeza, aunque en ciertos casos puede ser generalizada. La segunda, en cambio, aparece principalmente en las patas y el pecho.
3. Infección por hongos
Dentro de las causas de la formación de costras en perros también encontramos las infecciones por hongo. Esto ocurre debido a la prolongada exposición del perro a ambientes con un alto índice de humedad. También puede ocurrir por bañar en exceso al animal, por padecimientos inmunodepresores, al tener contacto con otros perros enfermos o debido a hipersensibilidad a elementos externos.
En este caso, las costras de la piel en el perro suelen tener una forma redondeada, y se encuentran acompañadas por otros síntomas como:
- Inflamación de la piel.
- Enrojecimiento.
- Caspa.
- Picor y rascado frecuente.
4. Leishmania
Las costras en perros también son consecuencia de la leishmania. Esta es una patología que, por desgracia, no tiene cura, por lo que el paciente debe recibir un tratamiento que alivie los síntomas.
En el momento en el que se contagia, el perro pasará por un período de incubación, con una duración de 3 a 18 meses. Será a partir de este punto que empiece a mostrar síntomas, representados por la caída del cabello, sobre todo en las patas, la cabeza y la cola.
Luego, empezará la fase en la que el perro sufrirá de pérdida de peso. Además, su piel pasará a engrosarse, derivando en la aparición de heridas y costras.
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