▷ ¿Los perros pueden comer patata? ¡Descúbrelo!

Siendo uno de los alimentos que suelen incluirse en multitud de recetas, no es de extrañar que te preguntes si los perros pueden comer patata. ¿Cada vez que las preparas tu compi no deja de relamerse? ¿Estás tentado a darle una probadita, pero temes que le haga daño? Aclara tus dudas al respecto en este nuevo artículo de VetEasy. 

1. ¿Los perros pueden comer patata?
2. ¿Cada cuánto los perros pueden comer patatas?
3. ¿Cómo no se deben ofrecer patatas a los perros?

¿Los perros pueden comer patata?

Este tubérculo, también llamado papa, responde al nombre científico de Solanum tuberosum. Es originaria de América, pero hoy en día está popularizada en todo el mundo.

En cuanto a si los perros pueden comer patata o no, realmente no hay una respuesta absoluta. Dependerá de varios factores, por ejemplo, la salud general del perro, así como sus características fisiológicas y hasta la cocción de las propias patatas. 

Entonces, se puede decir que los perros sí pueden consumir patatas, a menos que presente alguna patología que lo desaconseje garantizar la preservación de la salud. Lo que sucede es que, estos tubérculos pueden resultar indigestos para algunos individuos, por ejemplo, cuando padece diabetes o hay cierto tipo de intolerancia o alergia hacia alguno de sus componentes. 

Por otra parte, las papas son una buena fuente de carbohidratos; minerales como el potasio, el magnesio y el fósforo; al igual que vitaminas como la B3, C y la niacina.  

¿Los perros pueden comer patata verde?

Es importante saber que las partes verdes de las patatas resultan tóxicas debido a la sustancia que contienen, la solanina. De este modo, la intoxicación por solanina genera síntomas gastrointestinales como los vómitos, la diarrea y el dolor abdominal. 

Dicha tonalidad puede deberse a que al tubérculo no le da dado el sol o porque todavía no está maduro. Sin embargo, pelándola y cocinándola se puede disminuir la cantidad de la sustancia.

¿Cada cuánto los perros pueden comer patatas?

Se recomienda su consumo solo de forma esporádica u ocasional, es decir, no puede convertirse en el ingrediente principal de la dieta. De hecho, este tubérculo puede ser incluido en dietas blandas ante episodios de diarrea antes de regresar a la alimentación habitual. También suelen incorporarse en dietas de exclusión o para perros con alguna alergia alimentaria, siempre con el visto bueno del veterinario. 

¿Cómo no se deben ofrecer patatas a los perros?

Hay algunas excepciones a lo que ya has leído de que los perros pueden comer patata, estas son: 

• No es recomendable ofrecer patatas crudas, de hecho, se incluye como un alimento prohibido. Tampoco permitir que mordisquee o juegue con ellas en dicho estado, tanto con piel, como sin piel. Estas resultan indigestas y pueden contener gran cantidad de solanina.
• Las patatas en bolsa no son una opción saludable, contienen gran cantidad de grasas y sal. Esta última, si se consume en exceso, puede resultar tóxica para los perros, generando letargo, vómitos, descoordinación, entre otros síntomas; incluso puede producirse un coma en los casos más graves, así como la muerte. Las patatas fritas también pueden relacionarse con el desarrollo de pancreatitis.

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