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Las cestodosis en perros es un padecimiento consecuencia de los cestodos, parásitos que se alojan en el cuerpo de tu mascota y pueden ocasionar varios síntomas.
En este tipo de casos, la prevención es vital, de manera que puedas ahorrarle a tu compañero el malestar de la infección por gusanos. Y para ello, es importante conocer los medios de transmisión y así prevenir su contagio.
- ¿Qué es una cestodosis en perros?
- ¿Cuáles son las vías de contagio?
- ¿Qué síntomas presenta una cestodosis en perros?
- Tratamiento para las cestodosis en perros
- ¿Cómo prevenir?
¿Qué es una cestodosis en perros?
Se refiere a la infección de cestodos, es decir, parásitos que se transportan por diferentes medios hasta llegar a un huésped final que es el perro. Allí, se alojan en el intestino o en el aparato digestivo, y crecen progresivamente hasta convertirse en un problema grave.
De estos existen dos tipos comunes. El Echinococcus multilocularis, que utiliza a pequeños roedores como intermediarios, pero también pueden encontrarse en bayas, setas o en el mismo pelaje del perro. Sus huevos se propagan con gran facilidad cuando hay viento.
Por otro lado, está la Tenia o Echinococcus granulosus, que vive en el intestino de los animales, y puede propagarse hacia los perros por medio de vísceras crudas.
Es necesario mencionar que ambos parásitos pueden contagiar a los humanos y, en ocasiones, las lombrices logran generar síntomas graves en ellos.
¿Cuáles son las vías de contagio?
Los filos responsables de causar cestodosis en los perros tienen varios medios de contagio. Como ya se mencionaba antes, se suelen usar animales intermediarios, como los roedores, para llegar al huésped final. No obstante, también están presentes en otros sitios, por ejemplo, en las heces, las vísceras crudas, el pelaje e incluso en algunos frutos.
Las pulgas, por su parte, son uno de los principales transmisores de lombrices planas o Tenias, por lo que se vuelve un padecimiento muy común en perros.
¿Qué síntomas presenta una cestodosis en perros?
Lo curioso de la cestodosis es que, en un principio, suele ser asintomática. Es decir, que durante los primeros días en el que las lombrices habiten el intestino de tu mascota no verás signos de que esto está ocurriendo.
Sin embargo, conforme pase el tiempo y el filo adquiera cierto tamaño, empezarás a notar ciertos síntomas característicos de este padecimiento. Por ejemplo:
- El pelaje del perro se pondrá áspero.
- Se verá más delgado.
- Perderá el apetito.
- Tendrá diarrea o vómitos.
- Presentará hinchazón abdominal.
Tratamiento para las cestodosis en perros
Tras un análisis de las heces del perro que confirme la presencia de cestodos, se procede a recetar un tratamiento antiparasitario por parte del veterinario. Este tiende a ser específico dependiendo del tipo de parásito que habita en el animal, y puede aplicarse de forma oral como jarabes y pastillas, o por pipetas spot e inyecciones.
Los cachorros, por su parte, deben someterse a desparasitaciones regulares para evitar la infección de cestodos y otros seres. Dicho esto, la primera debe realizarse a las 3 semanas de vida, y luego repetirse este proceso en un intervalo de tiempo distinto.
¿Cómo prevenir?
Para prevenir la cestodosis en perros, debes considerar los siguientes puntos:
- Desparasitación interna y externa periódica.
- Evita darle vísceras crudas que puedan hospedar parásitos.
- En caso de tener sospechas de una cestodosis, hacer un análisis de heces tan pronto sea posible.
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