¡NOVEDAD!
Esta superficie de apoyo está expuesta a sufrir diversos accidentes o heridas de diferentes grados, desde pequeños cortes, hasta grietas, lesiones o irritaciones de mayor gravedad. Es por eso por lo que hoy vamos a hablar sobre cómo cuidar las almohadillas de nuestros compañeros y cómo cuidarlas. ¡Allá vamos!
- ¿Cómo curar una almohadilla de perro en carne viva?
- No dejes que tu compañero perruno toque la zona
- Te recomendamos que lo consultes con un veterinario
- ¿Cómo cuidar las almohadillas de los perros?
¿Cómo curar una almohadilla de perro en carne viva?
Uno de los principales causantes de la almohadilla en carne viva es la erosión y, ante esta, es importante actuar con rapidez. Lo primero que debes hacer es lavar con agua tibia la zona afectada, de manera que se elimine cualquier impureza que pueda estar presente. Además, de acuerdo al pelaje de tu compi, conviene apartar el pelo que suele crecer alrededor de esta área. La razón es sencilla, ya que, este puede llegar a contribuir a que la humedad se acumule y, así, favorecer que diversos microorganismos proliferen en la herida. Después de lavar y despejar, lo mejor es dejar que la almohadilla cure sin ser tapada. Aunque, existen casos donde es necesario cubrirla. En estos casos, se debe hacerse con una gasa esterilizada y emplear esparadrapo hipoalergénico.
No dejes que tu compañero perruno toque la zona
Otro detalle a considerar es que, debes evitar que tu comapñero se toque, muerda o lama la zona. Dichas acciones pueden llegar a perjudicar el proceso de curación.
Te recomendamos que lo consultes con un veterinario
Ante cualquier herida o enfermedad, lo correcto es acudir al veterinario, y una almohadilla en carne viva no es la excepción. Es decir, aunque puedas aplicar el método de cuidado que hemos mencionado anteriormente, lo mejor es que, después de lavar la almohadilla o de realizar el procedimiento completo, te pongas en contacto con un profesional veterinario. Este podrá indicarte qué más debes hacer o si es imprescindible llevar a tu compi a consulta.
Y recuerda no automedicar nunca a tus mascotas, pregúntale al veterinario qué puedes darle a tu perro si notas que tiene dolor o ante otro problema. Si lo haces, podrías causarle serios problemas que pueden no tener solución.
¿Cómo cuidar las almohadillas de los perros?
Como cuidador, puedes ayudar a tu compi a evitar una almohadilla en carne viva y muchas de las otras heridas que puede sufrir. Por ejemplo, el verano es una estación donde las abrasiones y quemaduras están a la orden del día. En esta época, no salgas a pasear cuando el son es más incidente y recurre a accesorios para proteger sus patas.
Igual sucede en el invierno, donde el frío, la nieve y el hielo no solo pueden provocar quemaduras, sino que también propician la resequedad de las almohadillas. En estos casos, botines o calcetines para nuestros perros pueden ser una buena idea, al igual que mantener una rutina de hidratación con productos especiales durante todo el año.
Por último, revisa siempre las patas de tu perro, tanto después de salir a pasear, como si decidís quedaros en casa. Visualiza a tiempo cualquier elemento extraño que pueda herirlas o si se muestran signos tempranos de lesiones en las almohadillas.
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